¿Sabías que el nombre científico de la mayoría de los gatos domésticos es "Felis Silvestris Catus"? Quizá de ahí "venga" la costumbre de llamar Félix a muchos de estos peludos...
Hoy vamos a intentar averigüar un poco más de una de las primeras mascotas del ser humano: el gato doméstico.
Peso y tamaño
Pequeño - mediano. Entre 2,5 y 5 kg las hembras y 4,5-7 kg los machos.
Promedio de vida
12-16 años
Relación con los niños
Buena aunque mejor bajo supervisión, sobre todo en el caso de bebés.
Relación con gatos
Buena, especialmente cuando los ejemplares son de sexo opuesto.
Relación con perros
Puede ser buena, si la socialización de ambas mascotas es la adecuada.
Necesidades de mantenimiento
Cepillado 3 veces por semana en gatos de pelo largo y 1 vez por semana en gatos de pelo corto.
Utensilio, juguete o superficie adecuada para afilar las uñas.
Características principales
independiente, buen cazador, fiel
Número de crias
De 1 a 6 crías 3-4 veces al año
Enfermedades comunes
Ninguna en particular si el animal cumple el calendario habitual de vacunaciones, recibe una alimentación equilibrada y vive en condiciones higiénicas correctas.
Descripción
Una de las características principales del Felis Catus, gato común o gato doméstico es que aglutina a decenas de razas distintas. Así, describir a un "gato tipo" es prácticamente imposible.
De pelo largo o corto, de uno, dos o tres colores, con amplia cola o sin ella (por mutaciones genéticas), con orejas puntiagudas o redondeadas... en fin, cada gato es "un mundo".
Pero si físicamente cada Felis Catus es diferente, no lo es un rasgo fundamental de su carácter: la independencia. Todos los que disfrutamos de un minino en nuestro hogar lo sabemos bien: él o ella adoran a su familia, pero... cuando le apetece. No es raro que se acurruquen en nuestro regazo, que nos hagan mimos o que se metan en nuestra cama, pero si se lo pedimos... bueno, lo pensará muy bien y, si lo decide apropiado, lo hará. Como le dijo la rana al escorpión en el cuento: "lo siento, es mi carácter".
Subcategorías
Que hay decenas de razas de gato común es muy evidente si nos fijamos, sobre todo, en su pelaje y en sus ojos.
Su pelaje puede ser de un solo color - negro, blanco -, bicolor -blanco/naranja, negro/blanco -, con rayas (gatos atigrados de suaves colores naranjas o grisáceos), muy largo o muy corto...
Pero un detalle muy interesante: los gatos de tres o cuatro colores son siempre hembras o machos con una anomalía genética (los llamados machos XXY). Curioso ¿verdad?
En cuanto a los ojos: azules, verdes, dorados... pero siempre muy muy brillantes. ¿Por qué brillan tanto los ojos de nuestro Felis Catus? La explicación no es complicada. Detrás de la retina de los gatos existe una capa de tejido denominada "tapetum lucidum". Esta especie de espejo cóncavo refleja los rayos lumínicos dando la impresión de que la propia luz irradia de sus ojos. Con ello consiguen no sólo ver 6 veces mejor que los seres humanos sino también asustar a sus pobres presas (ojos "demoniacos"...).
Cuidados
En general, un gato casero con una alimentación adecuada y equilibrada a su gasto energético, que cumpla con su calendario de vacunaciones y que haga el suficiente ejercicio, no tiene por qué tener problemas importantes de salud. Es una raza fuerte, resistente y - en las condiciones adecuadas - muy longeva.
A pesar de ello, no tenemos que olvidar las pautas básicas de higiene que hemos mencionado en varios de los artículos de nuestro Blog:
- Cepillado entre 1 y 3 veces por semana (en función de la longitud del pelo y de si el gato está mudando o no).
- Baño mensual o bimensual.
- Limpieza periódica de los oídos para evitar suciedad que derive en infecciones.
Enfermedades
Como comentamos, un gato "equilibrado" no suele padecer enfermedades importantes. No obstante, tenemos que respetar rigurosamente el calendario de vacunación que nos proponga nuestro veterinario. Por ejemplo, recuerda que cada año deberías vacunarle de la rabia (sí, ellos también pueden sufrirla), la leucemia, la rinotraqueitis, el calicivirus y la canleucopenia.
Historia
Un interesante Estudio de la prestigiosa revista Nature publicado en el 2007 sitúa el origen del gato doméstico hace nada más y nada menos que 130.000 años. Ya ha llovido... ¿verdad? Parece ser que fue por esa época cuando los antepasados de nuestros felinos comenzaron a interesarse por la comida y cobijo de los que disfrutaba el ser humano. Vieron, pensaron... y decidieron.
Una curiosidad: numerosas culturas han disfrutado de estas independientes mascotas en su andadura histórica, pero habitualmente se reconoce a los egipcios como los primeros en "domesticarlo" y, también, en elevarlo al rango de dioses (recordemos a la preciosa diosa egipcia Bastet con cabeza de gato).